viernes, 9 de junio de 2023

¿Es buena idea la novela romántica fantástica?

Romance y fantasía. Dos géneros que pueden ir perfectamente de la mano. A día de hoy, en algunos foros y redes sociales se está empezando a pedir que se distinga la fantasía con una trama de romance de las novelas de romántica fantástica, que serían las novelas del género del romance situadas en un mundo de fantasía. A modo de ejemplo, pensar en Sarah J. Maas y su saga de Una corte de rosas y espinas.

Como lectora de ambos géneros, la idea me parece interesante. Saber con más seguridad cuanto de romance va a tener un libro me ayuda bastante. Una no siempre está en el mismo mood, después de todo, y hecho de menos saber exactamente a donde dirigirme cuando quiero un buen libro con vampiros y salseo (insertar aquí mi campaña para que vuelvan las sagas de vampiros).

En el mundo angloparlante, la editorial Tor ha creado el sello editorial Bramble, un género de romance dedicado en exclusiva a publicar romántica fantástica. Para los de habla hispana, Penguin Random House ha decidido poner en su página web una categoría para los libros que considera que cuadran con el subgénero. ¿El problema? Que me han puesto en la misma categoría Casa de tierra y sangre y Crepúsculo,  y esto de juntarme una misma categoría un libro de fantasía adulta escrita por una mujer, con un libro de fantasía juvenil... pues me huele al viejo problema de siempre.

En los últimos años se ha hablado mucho de que a las autoras de fantasía se las suele meter a calzador en la categoría juvenil (un día os cuento mi teoría conspiranoica sobre The Kinder Poison). De hecho, Una corte de rosas y espinas fue vendida durante años como literatura juvenil, y ahora es una saga que se puede considerar como la fundadora del género conocido como "porno de hadas".

Con esta clasificación que ha hecho Penguin Random House, miedo me da que vayamos camino de otro problema muy similar: que cualquier autora que se atreva a poner un triste beso en su libro de fantasía sea puesta en esta categoría y, por qué no decirlo, que se recomiende erótica a menores de edad porque, total, están todos en el mismo grupo.

Esto último no es un hipotético, porque Planeta ya ha decidido que la saga de Ice Planet Barbarians, de Ruby Dixon, no solo cuadra bien en la categoría de erótica, sino también en la de juvenil.

1 comentario:

  1. Como siempre, las clasificaciones tienen sus problemas. A mí no me parece necesario identificar en categorías distintas las novelas de fantasía en las que el romance es el eje central. En caso de que me interese una novela, siempre la investigo y leo varias reseñas; con eso sé si el romance es un pilar fundamental o no.

    La clasificación de Penguin Random House no me parece mal porque es sincera: "categoría fantasía romántica". No especifica si es adulta o juvenil. Seguro que si tienen una de ciencia ficción tendrá 1984 junto a Los juegos del hambre.
    Por otra parte, no sé qué tan adulta será Una corte de rosas y espinas, pero leí Trono de cristal y era juvenil. Además, puede que Crepúsculo sea muy juvenil, pero la última también tiene escenas subidas de tono.
    Por último, la categoría de "juvenil" es algo también muy complejo. ¿Solo porque tengas escenas subidas de tono y violencia muy gráfica ya no es juvenil? ¿Y quién decide los límites? After es juvenil, pero hace diez o veinte años se hubiera considerado erótica adulta.

    Un saludo,
    Laura.

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